Población: Santurde
Distancia: 14,85km
Desnivel: 472m
Tiempo: 4h30'
Cuando busco rutas no señalizadas, como soy muy precavida, intento que parezcan fáciles de seguir (es decir, pista). Esta al final ha estado más señalizada de lo que creía, pero bueno...
Aparcamos en Santurde, cerca de la plaza, donde tenemos ya preparada la decoración de navidad.
Desde aquí, atravesamos el pueblo dirección sur. Al acabar los edificios, tenemos que girar a la derecha, y empezar a subir. Y aquí es donde veo que sí que estaba señalizada (¿Cuántas más habrá que yo no sepa que existen?)
No hay pérdida si seguimos la pista, y en seguida ganamos altura. Nosotras, que somos unas aventureras, nos metemos por medio de unos pinos, que parece que el camino está bien... Y claro, luego tenemos que subir monte a través, sin camino ni nada, hasta volver a enlazar con la pista de la que hemos pasado olímpicamente, porque somos así de caprichosas. Es que las rutas sin aventurilla, son muy aburridas.
Una vez arriba, avanzamos de nuevo por "donde debíamos". Las vistas, cuando nos asomamos, están bien. Un día despejado, tienen que ser geniales.
Cuando llevamos unos 6km de camino, tomamos el desvío señalizado, que nos lleva a la cima de El Hermoso. El viento es tremendo (no juzguéis estos caretos).
Con el pequeño gran triunfo de no salir volando, volvemos a por la pista de la que nos habíamos desviado, para seguir adelante, a buscar la siguiente cima del dia.
En alguna ocasión estamos tentadas a repetir la hazaña de los pinos, pero tampoco necesitamos tanta aventura... Así que nos portamos bien y llegamos a la cima de Sampol, donde hay un avión, y un belén (¡Feliz navidad! otra vez).
Si nos acercamos más hacia el borde, veremos Santo Domingo de la Calzada (y un camino que estoy segura de que llega allí).
Aquí, que se nota menos viento, aprovechamos a comer. Una vez descansadas y alimentadas, volvemos a la pista y empezamos a bajar, de nuevo dirección a Santurde. Por cierto, este tramo, para mi gusto, el más bonito.
Llegamos al pueblo por el otro lado, directas a donde hemos dejado el coche. Vamos a tomar un café en la terraza, que a pesar de ser diciembre, se está divinamente. ¡Nos vemos!
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